sábado, 18 de mayo de 2013

Meditación: La mente Silenciosa.



La dificultad de los seres humanos es que nunca han observado
un árbol, un pájaro, sin división.
Y debido a que nunca observan totalmente a un árbol ó un pájaro,
no pueden observarse a sí mismos completamente.

La experiencia personal tiene muy poca validez en los asuntos religiosos;
no obstante, los seres humanos han dado importancia a la persona.

La persona representa la tradición, la autoridad , la forma de vivir,
y a través de eso esperan conseguir o alcanzar la iluminación o el cielo.
Pero la experiencia personal no tiene ningún valor en relación con la verdad.

Así, pues, negar la experiencia personal
es negar el “yo”, porque el”yo”
es la esencia misma de toda experiencia,
que es el pasado.

Porque la verdad no es algo que uno experimente;
la verdad no es algo hacia lo cual uno avanza gradualmente;
no es a través de innumerables días de práctica, de sacrificio,
de control, de disciplina, que uno puede alcanzarla.

Si lo hace, entonces es una experiencia personal, y si se trata
de una experiencia personal, entonces hay división entre el “yo”,
la persona y la cosa que uno experimenta. Aunque uno intente
identificarse con esa experiencia, seguirá habiendo división.

¿Puede el hecho de ajustarse a un modelo – sea el que sea -- conducir a la verdad?

Es obvio que no.

“Quizás recuerden ustedes la historia de cómo el diablo y un amigo suyo estaban paseando por la calle cuando vieron delante de ellos a un hombre que levantaba algo del suelo y, después de mirarlo, se lo guardaba en el bolsillo. El amigo preguntó al diablo:

“¿Qué recogió ese hombre?” “Recogió un trozo de la Verdad”, contestó el diablo. “Ese es muy mal negocio para ti, entonces”, dijo su amigo. “Oh, no, en absoluto”, replicó el diablo, “voy a dejar que la organice”.

 Al ver cómo las religiones organizadas realmente han destruido la verdad,
inculcando en el ser humano mitos absurdos para que se porte bien,
si uno se da cuenta de todo eso, ¿ qué lugar tiene entonces la meditación?
¿Qué lugar tienen los guías, los gurús, los salvadores, los sacerdotes? .....

¿Es la meditación algo que deba practicarse diariamente?
Practicar significa conformarse con un modelo, imitar, reprimir....;
ya sabe, todo lo que está implicado en el conformismo.

¿Acaso uno medita porque se trata de una larga y establecida tradición?
¿Meditamos por eso? ............

¿Qué es la meditación tradicional, ya sea cristiana, hindú, budista, tibetana ó Zen?
Ya sabe: todas las diferentes meditaciones y sus escuelas, para mí eso
no es meditación en absoluto. Entonces ¿qué es meditación?.

¿Porqué hacer de la meditación un problema?
Los seres humanos tenemos suficientes problemas, tanto físicos como psicológicos.
¿Porqué hacer de la meditación un problema más?
¿Por qué añadirle al ser humano un problema más, cuando ya tiene miles?

¿Es la meditación una forma de evadirse de los problemas,
de evitar lo que realmente es y, por tanto, no es meditación en absoluto?
¿O la meditación es comprender el problema de vivir?

Si meditar representa un problema, si uno hace de la meditación otro problema ....
por ¡Dios! Déjela. ¿Comprende que quiero decir?

Personalmente, niego toda esa clase de meditación, toda práctica,
el constante repetir una palabra como hacen en India, en Tibet,
por todo el mundo, ya sea el Ave María o cualquier otra palabra.
Repetir, repetir, repetir; eso no tiene ningún sentido:
vuelve a la mente más absurda y grotesca de lo que es.

A menos que el ser humano sea una luz para sí mismo,
nada tiene importancia, porque si depende de alguien,
se encuentra entonces en un estado de perpetua ansiedad.

Primero tiene que solucionar sus problemas, ¿no es así?.
Debe poner orden en la casa, en la casa en la que vive,
y esa casa es el “yo”
... mis pensamientos, mis sentimientos, ansiedades, culpa, pena,....,
debe poner orden ahí.
Sin ese orden, ¿cómo seguir adelante?.

No estoy buscando orden; estoy viendo que hay desorden
y quiero saber porqué lo hay. No pretendo encontrar orden,
porque entonces aparecen todos los gurús y todo lo demás.

De modo que no deseo orden; sólo quiero descubrir
por qué en nuestras vidas hay tal caos y desorden.
El ser humano tiene que descubrirlo,
no pedirle a alguien que le diga si hay desorden.

Si uno intenta solucionar el desorden será siempre alguna idea
preconcebida del orden; es decir, según el orden cristiano, el
orden hindú, el orden socialista, el orden comunista ...; cualquier orden.
Mientras que si uno observa completamente el desorden, entonces ahí no hay dualidad.

Mirar el desorden sin el “yo”. ¿Es eso posible?.
Porque entonces eso es meditación.
¿Lo entiende señor?, no toda esa tontería de la que hablan.

Observar sin división, observar sin el “yo”, que es la misma esencia que el pasado,
ese “yo” que afirma, “debería”, “no debería”, “tengo que”, “no tengo que”;
ese “yo” que dice: “ he de alcanzar”, “ he de llegar a Dios”, o lo que sea.
Entonces, ¿es posible observar sin el “yo”?.

Uno no puede experimentar la inmensidad del océano.
Ahí está para que uno lo mire; pero no es su océano.
Así pues, si deja todo eso a un lado surge la pregunta:

¿es posible observar sin el “yo”?; observar este desorden total
de los seres humanos, sus vidas, el modo en que viven...;
¿es posible observarlo sin división?

Para observar totalmente,
no debe haber ninguna evaluación en absoluto

La meditación no es la búsqueda de una experiencia trascendental
que le proporcionará gran energía para volverse más malicioso.
La meditación no es un logro personal, ni sentarse cerca de Dios.

La meditación es un estado de la mente en la cual el “yo” esta ausente y,
por tanto, esa misma ausencia trae orden, y deber haber ese orden para seguir adelante.
Sin ese orden las cosas se vuelven absurdas.

¿Puede la mente observar sin tiempo, sin la memoria,
que es el alimento de la mente?

Como ve señor, después de todo, lo único que uno puede hacer es señalar y ayudar
a la persona a ir hacia la puerta; pero de ella depende abrir esa puerta.

Una mente que ha investigado, que ha indagado todo esto,
se vuelve extraordinariamente activa y, por tanto, silenciosa.

Para observar el desorden, el “yo” con sus recuerdos,
con sus estructuras del tiempo, no debe estar presente;
entonces en esa cualidad hay una quietud en la mente que observa,
y esa quietud no es algo que se consiga por ninguna práctica,
sino que viene con naturalidad cuando uno tiene orden.

La dificultad de los seres humanos es que nunca han observado
un árbol, un pájaro, sin división.
Y debido a que nunca observan totalmente a un árbol ó un pájaro,
no pueden observarse a sí mismos completamente.
                                                                             J.Krishnamurti



4 comentarios:

  1. He llegado hasta aquí, a través de otros blogs amigos y como me gusta todo lo que he visto, me quedaré por aquí.
    Saludos desde Las Cosas de Julia

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  2. Angelita vengo a darte el premio Liebster para reconocer todo el empeño que le pones a tu hermoso blog un abrazo grandeee el premio te espera en mi espacio :) xoxo eliz

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  3. que linda alegría Julia!!! Gracias por quedarte aquí, ya pasaré por las cosas de Julia, y seguramente moraré allí!!! siempre bienvenida, bendiciones!!!!

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  4. Gracias!! Eliz, que gran reconocimiento!! tomo éste premio!! me las ingeniaré y lo traeré infinitas gracias Eliz!!!

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