domingo, 3 de julio de 2011
Escuchando a nuestro angel
Los Ángeles están siempre con nosotros, observadores de nuestras dificultades y solícitos ayudantes que nos envían alivio a los dolores, son nuestros maestros, compañeros amorosos.
Aunque la tarea de los Ángeles no es fácil , su amor permanece inmutable y su paciencia es infinita.
Si nos acostumbramos a la idea que los Ángeles comparten nuestra vida cotidiana, nos daríamos cuenta de que nuestra responsabilidad hacia los demás aumenta y de que somos más sensibles, pero fuertes.
Una buena relación con Ellos presupone una mayor apertura espiritual, una mayor disponibilidad para aceptar a los demás y para entendernos a nosotros mismos.
Se necesita muy poco para cambiar las costumbres.
Un pensamiento positivo , una sonrisa, una plegaría pequeña pueden ser suficientes para hacer diferente nuestro presente, para hacernos sentir más serenos y protegidos, más conscientes de que no estamos solos y de que no lo hemos estado nunca.
Escuchamos a nuestro ángel cuando abrimos nuestro corazón a sus palabras silenciosas, susurra sus consejos a nuestra alma y no a nuestros oídos...
Relajate, silencia tu mente, centrate en tu interior, confía y de seguro sentirás la presencia del Ángeles.
Andrea.
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Bellísimo. Gracias:)
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