sábado, 28 de abril de 2012

El bordado de Dios.




Cuando era pequeño, mi mamá solía coser mucho. Me sentaba cerca de ella y le preguntaba qué estaba haciendo. Ella me respondía que estaba bordando.


Observaba el trabajo de mi mamá desde una posición más baja que donde estaba sentada ella, así siempre me quejaba diciéndole que desde mi punto de vista lo que estaba haciendo me parecía muy confuso.


Ella me sonreía, miraba hacia abajo y gentilmente me decía:


-Hijo, ve afuera a jugar un rato y cuando haya terminado mi bordado, te pondré sobre mi regazo y te dejaré verlo desde mi posición.


Me preguntaba por qué ella usaba algunos hilos de colores oscuros y por que me parecían tan desordenados desde donde yo estaba. Unos minutos mas tarde escuchaba la voz de mi mamá diciéndome:
-Hijo, ven y sentarte en mi regazo.
Yo lo hacía de inmediato y me sorprendía y emocionaba al ver la hermosa flor o el bello atardecer en el bordado.
No podía creerlo; desde abajo se veía tan confuso…
Entonces mi mamá me decía:
-Hijo mío, desde abajo se veía confuso y desordenado, pero no te dabas cuenta que había un plan arriba. Había un diseño, solo lo estaba siguiendo. Ahora míralo desde mi posición y sabrás lo que estaba haciendo. Muchas veces a lo largo de los años he mirado al Cielo y he dicho:
-Padre, ¿qué estás haciendo?
Él responde:


-Estoy bordando tu vida.


entoncés yo le replico:


Pero se ve tan confuso!! es un desorden. Los hilos parecen tan oscuros!! ¿por qué no son más brillantes?
El Padre me decía:


-Mi niño, ocupante de tu trabajo…yo haciendo el mío, un día te traeré al cielo, te pondré sobre mi regazo y verás el plan desde mi posición. Entonces entenderás.


“Confía en tu Ser, pídele lo que necesites pero no le indiques ni discutas cómo te lo conceda. Porque él, ve toda tu existencia y más allá y sabe perfectamente qué y cómo es lo que te conviene en este preciso momento.” Sai Baba.


A veces no comprendemos las situaciones provocadoras de la vida, nos falta confiar en que hay un plan perfecto más allá toda prueba.


Cuando vemos con los ojos del alma, surge la comprensión, que es como un claro espejo de la consciencia. Muchas veces miramos la vida a través de un espejo cubierto de polvo, la confianza es lo que quita el polvo y limpia el espejo.


La comprensión de la no-casualidad de todo en nuestras vidas, hace que el espejo se vaya tornando cada vez más limpio. Un día el reflejo será perfecto y sobrevendrá la comprensión total de todo cuanto acontece en nuestras vidas.


“Por muy larga que sea la tormenta, el sol siempre vuelve a brillar entre las nubes.”
                                                 Khalil Gibran

2 comentarios:

  1. muy hermoso Anndy :) este autor es de mis favoritos :) gracias por compartirlo y por traerme lindos recuerdos :) un beso y muchas bendiciones para vos y todos los que te aman :)

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  2. También es uno de mis favoritos, me alegra que lo disfrutes!! bendiciones y abrazos amiga!!!

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